Tendencias multipolares

Surgimiento del Mundo Multipolar

Desde el periodo de la posguerra fría, con la desintegración de la Unión Soviética y el deterioro del sistema bipolar se dio paso a un mundo unipolar con la dominación de Estados Unidos, ya que tenía más capacidades socioeconómicas y políticas ante los demás países. Así, sin limitaciones políticas y con las riendas de la economía internacional, los poderes de aquel país fomentaron la revolución de las tecnologías de la información, los capitales financieros e industriales en los países que se encontraban en vía de desarrollo. De esta forma con una economía en crecimiento y de baja inflación fortalecieron el sistema económico proporcionando ventajas para afrontar la globalización. (Cui, L. 2011)

La globalización, para Cui (2011) benefició a gran variedad de países, sin importar su origen geográfico, ya sea del Occidente, Norte, Oriente o Sur, permitiendo la interacción mundial y el surgimiento del poder multipolar, el cual hace referencia al surgimiento de las economías de Europa, Japón, Rusia y China, ya que la globalización económica puso en detrimento la posición unilateral de Estados Unidos. Así, la globalización representa un nuevo orden económico y el mundo multipolar constituye la reorganización de las estrategias políticamente internacionales.

Figura 1. Bandera de BRIC.

Con la globalización se observa cada vez más que la rivalidad y la cooperación se encuentran vinculadas y la diversidad de modelos económicos implementados por cada nación emergente, como Brasil, China, e India, los cuales se deben analizar, reflexionar y poner en práctica. Dado que con las economías emergentes en esta era se confirma el orden político y económico hacia un mundo multipolar. (Cui, L. 2011)

Sin embargo Cui (2011), con la globalización se encuentran dos tipos de mundos que coexisten y en la mayoría de las veces se mezcla, uno en el que las naciones participan activamente en el libre intercambio de bienes y servicios y otro en el cual se caracteriza por la marginalidad existente dentro de su población, esta última debido a las diferencias en los sistemas políticos y en las ideologías.

Tal como se dijo anteriormente China y la Unión Europea son los centros que manifiestan el poder global, dado que con la globalización, el continuo crecimiento de su economía, desarrollo tecnológico y posicionamiento financiero han afianzado a China como potencia mundial, teniendo como resistencia la creciente importación de textiles, y con la integración de 25 gobiernos, unificación de la moneda, de políticas comerciales y financieras, han solidificado a Europa también como potencia mundial. (Navarrete, J. E., 2005)

Sin embargo, para el autor Richard Haass (2008), actualmente en el mundo se está evidenciando la tendencia hacia la no polaridad, es decir, un mundo en el cual no es dominado ni por uno, ni por dos, sino por docenas de actores que realizan diversos tipos de poder. Esta tendencia de no polaridad contrasta al sistema multipolar, dado que en este último no hay dominio por parte de ninguna potencia en especial y las agrupaciones de poder no giran en torno a dos polos. A simple vista, el mundo es multipolar ya que sus principales potencias, siendo China, Estados Unidos, Rusia, Japón, India y la Unión Europea, poseen el 75% del PIB mundial y representan el 80% del gasto global en defensa.

Aunque, en el mundo existen más centros de poder, no siendo Estados-Nación dado que paulatinamente han perdido la soberanía por la presencia de organizaciones no gubernamentales y corporaciones, hay diferentes potencias regionales, tales como Brasil, Argentina, Chile, Venezuela, México, Sudáfrica, Arabia Saudita, Egipto, Irán, Israel, Pakistán, Australia, Corea del Sur, Indonesia y Oceanía, los cuales hay que tener en cuenta para la distribución del poder, puesto que el poder ya no se encuentra concentrado mundialmente y pueden llegar hacer parte del mundo no polar. (Haass, R. N. 2008)

Por otro lado el autor Charles Krauthammer manifiesta que naciones nombradas con anterioridad catalogadas para ser potencias mundiales no logrará derrotar a Estados Unidos, por ejemplo el caso de China dado que con el tiempo este podría igualar el PIB estadounidense, no empelaría esa riqueza en el financiamiento de multinacionales o del desarrollo militar, ya que posee una coyuntura demográfica a la cual debe satisfacer necesidades, así mismo India también se enfrenta a la cuestión demográfica, al exceso de burocracia y a la escasa infraestructura. La Unión Europea posee un PIB considerablemente mejor que el estadounidense, pero no tiene una soberanía como tal que caracterice a un Estado-Nación. Y Rusia es la más opcionada, pero aún preserva la economía agrícola y enfrenta una población decreciente, Entre tanto, Japón no adquiere de mano de obra joven ni de la cultura política necesaria para ejecutar el papel de una potencia. (Haass, R. N. 2008)

Pero, Japón ha surgido como potencia financiera de primer orden, dado que su fortaleza es su estructura productiva y tecnológica. Las relaciones comerciales entre Japón y Estados Unidos se deben a la disputa productiva, financiera, a la competitividad y productividad, dado que está en juego la reestructuración del poder económico y político internacional. (Gutiérrez Pérez, A., 1990)

La consolidación financiera mundialmente se ha venido observando a través de la liberalización de los mercados, es decir la globalización, el surgimiento de nuevos agentes económicos y la integración progresiva monetaria, permitiendo una reasignación de la riqueza financiera entre las naciones, mediante el abaratamiento de la mano de obra y la destrucción de capitales, lo cual hace a Japón como el mayor acreedor financiero desde 1985 debilitando la economía estadounidense, ya que asume ventajas en cuanto a la industria y tecnología, al superávit comercial, a las regulaciones gubernamentales financieras, fortalecimiento de la moneda y la creciente tasa de ahorro interna. (Gutiérrez Pérez, A., 1990)

Otro motivo para que Japón sea un actor relevante internacionalmente, es debido al desarrollo de las fuerzas militares en Afganistán e Irak, en el Océano Índico, su Campaña para ingresar a las Naciones Unidas- Consejo de Seguridad- , el trato del tema nuclear con Corea del Norte, conllevando su diplomacia a relacionarse en temas de seguridad que conciernen a sus objetivos nacionales, cabe resaltar la intención de equilibrar las relaciones con China ya sea desde el interior reforzando su seguridad, como del exterior aliándose con Estados Unidos. (López i Vidal, L., 2010)

Así, con lo anterior es evidente que en el mundo actual se presencia una tendencia multipolar con las economías de China, Japón, Brasil India, Unión Europea y Estados Unidos, disputándose el poder político y económico internacional, sin embargo, el Movimiento de Países No Alineados también entran en aquella disputa.

Figura 2. Estados Unidos versus la Unión Europea.

Por otro lado, la hegemonía que Estados Unidos ejercía sobre el sistema se ha visto deteriorada por el progresivo debilitamiento de su propia economía, pero también y principalmente por el fenómeno de las potencias emergentes. Este nuevo escenario ha dado lugar a un relativo equilibrio del poder global, donde pareciera que ninguno de los actores tiene la capacidad para imponerse por sí solo a los demás, lo cual confirmaría la tesis expuesta por Deutsch y Singer.

En las relaciones internacionales la noción de equilibrio del poder ha desempeñado un papel fundamental, específicamente dentro de la escuela realista, cuyo autor más representativo ha sido Hans J. Morgenthau, dando a conocer en 1960 “Politics Among Nations” donde desarrolló los principios del realismo político; precisando los diversos alcances que atribuye al concepto, de este modo, Morgenthau daba cuenta que la noción de equilibrio de poder no solamente aplicaba a las situaciones de efectivo balance de poder entre las partes, sino también a cualquier distribución de poder que pudiera existir en un contexto y época determinados.

En el sistema actual, a pesar de la reintroducción de algunos elementos multipolares no ha surgido un nuevo consenso acerca de la conducción de las políticas exteriores, que proyectan al ámbito internacional esquemas políticos nacionales mutuamente excluyentes, además, los avances tecnológicos, en especial las innovaciones en el ámbito militar han aumentado significativamente las capacidades nacionales para el conflicto. Por último, el crecimiento económico demográfico que ha abarcado a gran parte del mundo permitió el surgimiento de nuevas potencias emergentes aumentando las perspectivas de cooperación, pero a su vez incrementando las tensiones y conflictos interestatales. Estos fenómenos dan lugar a procesos de coalición y conflicto que superan los límites de la variante del balance del poder y refuerzan las características de heterogeneidad e inestabilidad del sistema.

Lo anterior nos lleva a uno de los aspectos más importantes del mundo político interestatal, el papel desempeñado por las potencias económicas y políticas del mundo. La consideración de la realidad político-internacional revela, la existencia de un grupo de países potencia, variable en cuanto al número y su composición, estos se destacan en las instancias internacionales y multilaterales por su poder de decisión e influencia.

A lo largo de la historia han existido potencias en las diferentes sociedades, estas han ido sucediéndose hasta llegar al sistema internacional, partiendo de Esparta y Atenas en el mundo de los Estados-ciudades helénico hasta a la actualidad. Pero en un sentido estricto, el concepto de “gran potencia”, es un concepto moderno, aplicado a un fenómeno que alcanza su manifestación en el sistema moderno. Por eso la crisis sufrida por el sistema de Estados moderno, al transformarse de sistema europeo en sistema mundial, arrastraría consigo una crisis de las grandes potencias tradicionales, desbordadas y sustituidas por lo que se conoció como superpotencias entre 1945 y 1991, papel desempeñado por Estados Unidos y la Unión Soviética en el contexto de guerra fría.

Toybee expone que cuando dos civilizaciones se encuentran en el espacio la que está dotada de mayor potencia radioactiva suscita en la otra una mutación radical en su actitud mimética, la cual se vuelca del interior al exterior. En otras palabras la civilización inferior comienza a imitar el modo de vida ajeno, al que toma como modelo porque se impone para escapar a su condición de inferioridad y, así sustraerse a la amenaza de ser degradada, un ejemplo clásico de esta situación fue la “Revolución Meiji” gracias a esta Japón, logro conjurar el peligro de ser degradada; en el caso de América latina vemos como el consenso de Washington impuso medidas que debían ser empleadas por los países en vía de desarrollo para lograr la aprobación de beneficios políticos y económicos; este papel de “guía” es desempeñado por esta gran potencia, actualmente existen grandes potencial a escala regional o en ámbitos, económicos, militares o energéticos, el concepto de potencia se identifica con el de potencia mundial. (Pellicani, 1992)

Son varios los factores que caracterizan a los estados potencia, aspectos como el crecimiento económico, el poder militar y la demografía son algunos de estos. Los conceptos de potencia y de poder son relativos por esencia, no son decisivas a la hora de clasificar las potencias las superficies ni una gran población, aunque deben tenerse en cuenta, gracias a los recursos económicos, a las reservas de potencial humano y a las posibilidades de relación. Son factores de especial importancia el desarrollo económico y social que crean un clima favorable; y asimismo, una clase dirigente consciente y dinámica.

Luego de la Segunda Guerra Mundial y hasta la década de 1960, el poder político y económico de Estados Unidos alcanzó su máximo desarrollo. Actualmente, continúa siendo la primera potencia económica mundial, así como una superpotencia, militar. Sin embargo en las últimos años Estados Unidos decae mientras los demás Estados ascienden, como explica Fareed Zakaria (2009) bajo las condiciones actuales se puede observar claramente que se está cumpliendo esta dinámica, otros Estados se están apropiando de iconos que antes eran propiamente americanos, la pobreza mundial está descendiendo y se espera que esta tendencia continúe descendiendo gracias a economías como China e India; en los ámbitos político y militar Estados Unidos continua siendo el Estado más poderoso, pero en sectores como el industrial, financiero, educativo, social y cultural la distribución de poder ha cambiado.

Figura 3. El dólar.

La capacidad de Estados Unidos para hacer prevalecer sus políticas estratégicas y económicas a escala global ha disminuido sensiblemente, como consecuencia del proceso de redistribución y difusión del poder en el sistema internacional. Estados Unidos ha afrontado importantes aumentos en los costos políticos y económicos de mantener una presencia global, pero al mismo tiempo ésta le reporta menos beneficios que en el pasado (Zakaria, 2009).

La tendencia norteamericana de retirarse de posiciones externas ha ido acompañada de un debilitamiento del consenso interno en cuanto a las prioridades políticas y defensivas. A pesar de que los compromisos de la OTAN, así como la presencia militar en Corea, las demandas norteamericanas han exigido mayores contribuciones de los estados beneficiarios de su defensa, llegando a presiones internas de reducción de los niveles de presencia militar en Europa y Asia.

Estados Unidos aun ocupa los primeros lugares en la escala mundial; sin embargo la unipolaridad ha llegado a su fin y pasara por la bipolaridad, tripolaridad hasta alcanzar la multipolaridad. Estados Unidos debido a su particular comportamiento aislacionista ha quedado rezagado frente a las tendencias actuales.

La cultura puede acomodarse como elemento bueno o no dependiendo el contexto, desde la perspectiva conservadora, la cultura y no la política es lo que determina el éxito de una sociedad. El proceso de occidentalización no solo fue por medio coercitivos, sino también fue por conocimiento transferido que llevo a cabo el proceso.

Las culturas orientales argumentaban por qué se debían copiar las costumbres de Europa. En primera instancia estaba la modernización que suponía industrialización, urbanización y niveles de alfabetización, educación y riqueza; posteriormente estaba el concepto de occidentales que suponían un legado clásico, el cristianismo, la separación de la iglesia y el Estado, el imperio de la ley y la sociedad civil.

El capitalismo y consumismo creado por Estados Unidos influencia en masas y es un proceso universal; la modernidad ya no está solamente en occidente, ahora la modernidad también puede estar en lo local, como ha pasado en China, Japón, Oriente Medio y América Latina.

India y China como posibles líderes mundiales de la economía global poseen un elemento esencial del poder económico y es su población, la cual es bastante significativa. Existen tres fuerzas que apuntan a un mundo con mayor apertura y conectividad que son: la política, la económica y la tecnológica; pero esta conectividad puede llegar a ser negativa en momentos de crisis, la escases en los recursos es uno de los temas más relevantes ya que aumenta la población y por tanto el consumo, los bienes básicos se acaban. El mejoramiento en las condiciones económicas profundiza los nacionalismos, este ha llevado a plantear un camino diferente al desarrollo ya que pretende entrar a las dinámicas de occidente pero bajo condiciones particulares.

India, el principal Estado en el sur de Asia, quien ha limitado la influencia de Estados Unidos en su política exterior se ha destacado porque en los últimos diez años se ha convertido en uno de los Estados más elogiados debido a su desarrollo y mantenimiento de la paz, lo que lo lleva a comenzar un proceso de promoción del país al mundo. Es claro que India será la tercera economía, en los próximos años. Una de sus ventajas es su población y además el fácil acceso al idioma inglés, lo que representa conocimiento de las tendencias de occidente.

El principal objetivo de la política exterior de la India es promover y mantener un ambiente externo pacífico y estable en el que las tareas domésticas de desarrollo económico inclusivo y la reducción de la pobreza pueden progresar rápidamente y sin obstáculos. Dada la alta prioridad asignada por el Gobierno de la India para el desarrollo socioeconómico. La India tiene un interés vital en un entorno externo favorable en todo el mundo, por lo tanto, busca una periferia pacífica y trabaja para las buenas relaciones con los Estados vecinos. La política exterior de la India también reconoce que las cuestiones como el cambio climático y la seguridad energética y alimentaria que son cruciales para la transformación de la India.

Figura 4. Bandera de la India.

Las relaciones bilaterales con China se consolidaron aún más en 2008 con la visita oficial del PM Dr. Manmohan Singh a China en enero y la visita de ministro de Asuntos Exteriores Shri Pranab Mukherji, en junio de 2008. La situación a lo largo de la frontera entre India y China se mantuvo tranquila mientras la cuestión de la frontera continua siendo abordada por los representantes especiales. La cooperación de defensa entre los dos países ha contribuido a elevar la confianza mutua. China abrió un nuevo Consulado en Calcuta en septiembre de 2008 y anteriores, en junio de 2008 India había abierto su consulado en Guangzhou (CIA, 2012).

India ha mantenido e intensificado su colaboración con la Unión Europea, un socio estratégico, así como los distintos países de Europa en diversos campos como la defensa y la seguridad nuclear y espacial, el comercio y la inversión, la energía, el cambio climático, la ciencia y la tecnología, la cultura y educación. La UE es hoy el mayor socio comercial de India y una de sus principales fuentes de inversión. (Fidler & Ganguly, 2010)

Los indios conocen a Estados Unidos y los estadounidenses conocen India, lo que ha generado un proceso catalogado como fuga de cerebros, pero que ha sido positiva ya que los indios vuelven con dinero e ideas de inversión, lo que genera desarrollo. India y Estados Unidos con el acuerdo nuclear llevan sus relaciones a un nivel más alto de colaboración, lo que lleva a la India a ser un actor muy importante en el ámbito mundial; el poder nuclear para india es observado desde una perspectiva en la que el mundo debe aceptarlos como tal y de la misma manera debe ser sólido y seguro.

Estados Unidos se ha visto beneficiado del crecimiento de otros Estados ya que sus exportaciones aumentaron y creció la inversión extranjera, proceso que resulta extraño para un país con un capital interno tan fuerte. Las industrias del futuro han marcado un hito importante en el sector económico, la nanotecnología es uno de los ejemplos más claros y Estados Unidos lidera esta industria, el objetivo esperado de ella es que sea la encargada de crear las materias primas que hoy están en decadencia por la sobre explotación (BBC, 2012).

Es evidente que retomar un sistema bipolar como el que prevalecía en la guerra fría, es una tarea que está muy lejos lograrse, las tendencias multipolares se arraigaron de manera estructural antes que coyunturalmente.

Actualmente Estados Unidos representa para el mundo la única súper potencia, la cual tiene capacidad de resolver o generar conflictos en diferentes partes del mundo, logrando plantear la agenda global según sus preferencias. Este poder no es prolongado en el tiempo, el auge de los demás continua y Estados Unidos se debilita poco a poco, su economía tiene dificultades, los gastos aumentan y los ahorros son bajos.

El hecho de ser una gran economía y tener un gran poder ha hecho que el Estado se vuelva arrogante a pesar de creer firmemente en la competencia; el 11 de septiembre de 2001 represento un cambio en la forma en que Estado Unidos se movía por el mundo sin obstáculos y de manera unilateral. El surgimiento de China, India, Brasil, Rusia, Sudáfrica y demás economías en desarrollo, creara roces entre ellos, paralelamente al nacionalismo, la economía y los interese geopolíticos serán prioridad en la agenda global.