Oferta de alimentos y seguridad alimentaria

El café, uno de los productos con mayor oferta en Colombia.

De acuerdo con el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, en términos generales, el país tiene una oferta estable y suficiente de alimentos. Este hecho se evidencia en el comportamiento de la producción agropecuaria, la cual ha presentado una tendencia creciente, después de la fuerte caída que se presentó a finales de los años noventa (figura 2). Sin embargo, la balanza comercial del país en términos de producto, ha presentado para este mismo periodo una tendencia negativa, lo que indica que cada vez el país importa más alimentos.

Contrasta el crecimiento que refleja la producción centrada en la cantidad de alimentos producidos con la cantidad de hectáreas cosechadas en Colombia, que fue evaluada por Beltrán & Piñeros en 2013 (figura 3), quienes pudieron concluir que existe realmente una tendencia decreciente de ella con un crecimiento negativo del -0.06% entre 1992 y 2011, aunque con una oscilación considerable y una desviación estándar de 4,76% frente a un promedio de 3.197.469 hectáreas.

Superficie cultivada para la producción de alimentos en Colombia
Comemos más alimentos de los que se producen, esta es una de las conclusiones que ofrece el Instituto Internacional de Investigaciones en Políticas de Alimentos (International Food Policy Research Institute), se trata de una advertencia en la que nos dicen que de seguir así, la situación será especialmente cruda para los países subdesarrollados que dependen en su mayoría de la producción que realizan los países industrializados. Los biocombustibles y el cambio climático propiciarán la desaparición de las escasas reservas mundiales de alimentos, la carencia de alimentos incrementará los disturbios sociales y una serie de problemas conformarán una situación caótica.[1]

El 27 de mayo de 2015, la FAO publicó en su portal que hay unos 795 millones de personas subalimentadas en el mundo, es decir: 167 millones menos que hace un decenio y 216 millones menos que en 1990-92. El descenso ha sido más pronunciado en las regiones en desarrollo, a pesar del considerable crecimiento demográfico (figura 4). Sin embargo, en otra publicación de las Naciones Unidas, en 2013, (http://www.un.org/es/globalissues/food/), se lee que “el número de personas hambrientas en el mundo sigue siendo inaceptablemente elevado, casi 870 millones en el año 2012. De ellos, la gran mayoría vive en países en desarrollo, unos 850 millones, poco menos del 15 % de la población”.

Comportamiento de la subalimentación a nivel mundial

Las afirmaciones anteriores, con notables discrepancias en cifras, sugieren que más allá de los logros propuestos por la Cumbre de Roma, lo que se vive hoy día es una inseguridad alimentaria que agobia más a los países en desarrollo que a los demás. Esta situación es necesariamente el resultado de problemas descritos anteriormente dentro de los cuales se destacan la escasez de agua, degradación de los suelos, contaminación atmosférica, cambio climático, explosión demográfica y problemas de gobernanza. Esta última se define como la ”eficacia, calidad y buena orientación de la intervención del Estado, que proporciona a éste buena parte de su legitimidad en lo que a veces se define como una "nueva forma de gobernar" en la globalización del mundo posterior a la caída del muro de Berlín en 1989”.

De acuerdo con esta evolución, en la Cumbre Mundial de Alimentación 2009, dicho concepto fue ratificado, incorporando la importancia del acceso social al alimento y posteriormente, mediante la gestión del Comité Mundial de Seguridad Alimentaria se reconoció la dimensión nutricional como parte integral de la definición.

En la actualidad este comité, a partir de la necesidad de vincular la seguridad alimentaria y la seguridad nutricional, propone abordar el siguiente concepto:

Existe seguridad alimentaria y nutricional cuando todas las personas tienen en todo momento acceso físico, social y económico a alimentos inocuos, cuyo consumo es suficiente en términos de cantidad y calidad para satisfacer sus necesidades y preferencias alimentarias y se sustenta en un marco de saneamiento, servicios sanitarios y cuidados adecuados que les permiten llevar una vida activa y sana.


[1]Directo al paladar. (2007). Situación alimentaria mundial, comemos más alimentos de los que se producen, un informe dramático que nos advierte. Recuperado de: http://www.directoalpaladar.com/otros/situacion-alimentaria-mundial-comemos-mas-alimentos-de-los-que-se-producen-un-informe-dramatico-que-nos-advierte.