Proceso de internacionalización

El proceso de internacionalización de las compañías exige capacidades distintas de aquellas que sostienen los esfuerzos locales, por esta razón los gerentes enfrentan retos particulares cuando surge la posibilidad de salir a los mercados extranjeros (Buitrago, 2012).

Ahora bien, desde la teoría institucional, podemos obtener información relevante en cuanto a la gestión como a la misma organización. Es en esencia, el punto principal que se debe trabajar para que exista un proceso de internacionalización.

Por un lado, ayuda a comprender las estructuras del entorno que limitan el proceso de toma de decisiones de los directivos -uno de los dos límites a la racionalidad, el otro es las limitaciones cognitivas (Simon, 1957)-, y por el otro, da el marco conceptual necesario para explicar cómo funcionan estas limitaciones y reglas en la organización, y cuáles son las implicaciones para su funcionamiento y configuración, teniendo en cuenta que la viabilidad y la rentabilidad de las actividades económicas están determinadas en parte por las instituciones (North, 1991).

Los procesos que se realizan dentro de la organización están encaminados por los procesos individuales en cabeza del gestor, quien es el pionero, el innovador, quien ve la oportunidad para expandirse no solo en escenarios locales, sino que, en los escenarios globales donde los directivos, los grupos de interés o stakeholders, son determinantes a la hora de realizar la incursión en nuevos contextos.

Es bueno precisar en esta mirada a los agentes que influyen en los procesos de internacionalización, quienes son las personas que integran y encaminan la organización al proceso a realizar, y quienes a su vez toman las decisiones más acertadas hacia los diferentes procesos de internacionalización. Estas decisiones se toman en escenarios que son cada vez más complejos; el entorno cada vez más dinámico y cambiante, y la diversidad de los mercados en los cuales puede incursionar, son dos de las bases más importantes a definir y es parte fundamental de la estrategia que se vaya a realizar en este aspecto.

En entornos complejos, los gerentes deben ser claros en algunas variables que son importantes e incluso en las características de complejidad, con las diferencias y de acuerdo con el caso de contextualización (Ibídem, s.f).

Las firmas, en cabeza de sus directivos, deben poner especial atención cuando se vayan a realizar estos procesos, ya que sin un estudio previo y con los elementos de análisis descritos anteriormente, las probabilidades de éxito, pueden disminuir drásticamente en el tiempo.

Puesto que es responsabilidad del equipo directivo determinar la causa de la pérdida de competitividad internacional e implementar las acciones correctoras necesarias para la recuperación, es evidente que si no otorgan la suficiente importancia a las señales, no pondrán en práctica las respuestas necesarias. Los resultados obtenidos por la organización pueden predecirse, en parte mediante las características directivas, estableciéndose un vínculo entre los valores y los procesos cognitivos de los directivos, sus características y los resultados organizativos (Barber, s.f).

Las estrategias y los procesos de internacionalización, se basan principalmente en la estrategia de crecimiento, esto aunado con el interés particular que tiene la firma para realizarlo. Son muchos los elementos que influyen directamente en la forma y el modo en que las empresas internacionalizan todo su modelo de negocio, basado en las experiencias de empresas del mismo sector o en otras de similar figura.

Algunas de estas teorías argumentan que las empresas se internacionalizan como respuesta a una iniciativa de reducción de costes y de aprovechamiento de las ventajas económicas de la externalización de sus procesos (Anderson y Gatingnon, 1986; Buckley, 1988); y otras argumentan que los procesos de internacionalización constituyen procesos de aprendizaje activo con base en la acumulación de conocimientos experimentales de los mercados externos (Johanson y Vahlne, 1990; Prahalad y Hamel, 1990, 1996a, 1996b; Diaz, 2011).

El comportamiento estratégico que tenga la firma en el proceso de internacionalización debe responder a la estrategia y estar alineado con la mejor forma de entrar en el mercado extranjero. Para esto, debe tener en cuenta los siguientes elementos:

Las estrategias de internacionalización que existen deben responder a dos elementos de análisis importantes: adaptación local eficiencia global.

Finalmente, la internacionalización exitosa requiere de la resolución conjunta de los dilemas de estrategia, estructura y recursos humanos, de tal forma que las decisiones sean internamente consistentes y congruentes.