Prerrequisitos para el implementar un programa de higiene y seguridad
Los peligros a los que se enfrentan los trabajadores de la organización deben ser diagnósticados, evaluados y controlados. Esta responsabilidad, por lo general, recae en el equipo de supervisores y directivos, o en los propios trabajadores. Para cumplir con el diagnóstico, se debe aplicar encuestas o entrevistas a los trabajadores, revisar los registros y las normas técnicas y jurídicas sobre los peligros de los diferentes puestos de trabajo.
La fase de evaluación inicia cuando se identifica la gravedad del riesgo, lo que implica realizar mediciones de exposición, compararlas con cifras de referencia y determinar los niveles de tolerancia al riesgo.
La tercera fase es la de control de los riesgos, cuyo propósito es reducirlos o eliminarlos.
Manejo del estrés laboral
Los criterios para contrarrestar los riesgos psicosociales y el estrés deben provenir de la dirección de la organización y contar con una buena actitud del empleado. Estos criterios deben apuntar a la reducción de las situaciones generadoras de tensión y a mejorar los ambientes laborales con el propósito de mejorar la productividad, la calidad en el trabajo y la salud de los trabajadores.
En este contexto, la gestión del talento humano debe reforzar esquemas que permitan mejorar el estilo de dirección y los procesos internos de comunicación con el fin de favorecer la superación y el buen desempeño de los empleados.