La complejidad en el subsistema del talento humano

«Un sistema surge en un proceso de reducción de complejidad; es menos complejo que su entorno y sus límites respecto a él no son físicos, sino de sentido» (Luhman, 1997).

El concepto de la complejidad alude siempre a la multiplicidad de relaciones que puede tener un objeto, una acción o una situación. Esta multiplicidad de relaciones, propia de la complejidad, lleva inmediatamente a plantear el tema de la selección y la conexión.

Se selecciona realizando una determinada conexión, esta se define como una defensa contra la complejidad que, al mismo tiempo, crea una mayor complejidad por llevar acompañada la apertura de un campo relacional que a su vez es apertura de nuevas posibilidades. Esta afirmación es una realidad de los sistemas y subsistemas en la complejidad. Cada uno de los subsistemas que el sistema ha generado repite la unidad del sistema que los ha generado.

La formación de subsistemas se encuentra directamente relacionada con la reducción de la complejidad. Una menor complejidad supone siempre una reducción en el exceso de posibilidades y una mayor eficacia en la selección y en el comportamiento del sistema. En este sentido, la relación entre los subsistemas de la organización presenta varios niveles para lograr su funcionamiento, eficacia y reflexión.

La relación de un subsistema de gestión del talento humano con los demás subsistemas que componen el sistema organizacional debe ser eficaz, pues sus principales características son la transversalidad que tiene en toda la organización y el recurso que maneja: personas creativas con capacidad para la investigación y la innovación, factores que influyen en la dirección y ejecución de las diversas tareas que se requieren para el cumplimiento de las estrategias.

En la interacción, los sistemas no se constituyen de partes o de constituyentes sino de acciones entre unidades complejas, constituidas a su vez por interacciones. Estas permiten comprender que el funcionamiento del sistema es más pertinente e interesarse por las relaciones entre los elementos del conjunto que por los propios elementos.